El pelotero líder en jonrones en la historia de la liga colombiana de béisbol profesional, Steve Brown Reyes, es uno de los pocos afortunados que puede decir que su familia, todos de la isla de San Andrés, no sufrió ni un solo daño por el pasó del huracán Iota. 

“Toda mi familia está bien. Gracias a Dios no les pasó nada”, explicó Steve a Zona Cero desde su residencia en Canadá, donde labora y se entrena con una de las mejores academias de béisbol en ese país. 

Steve, un histórico con 50 'bambinazos' y capitán de la novena de los Caimanes de Barranquilla, pudo contactarse con sus familiares y estos le confirmaron que ni ellos, ni su casa, sufrieron daños por el paso del fenómeno natural, categorizado de nivel 5, el más alto de la escala que los mide. 

Pero, al enterarse de la situación de la isla de Providencia, devastada en un 98% en su infraestructura, los Brown Reyes decidieron ponerse manos a la obra.

Ellos son conocidos por su actividad deportiva, pues tanto el padre de Steve, como él mismo, han representado al país jugando pelota. 

“No tuvieron daños de ninguna clase, y mi familia ahora mismo está recogiendo ayudas para Providencia”, expresó.

“Ya llenaron dos lanchas con muchas cosas y mañana con el favor de Dios se mandarán más y más”, agregó. 

Los Brown Reyes son algunos de los muchos isleños que tratan de tender la mano a esta situación. Sin duda un acto de amor y nobleza por sus compañeros raizales que fueron duramente castigados por la naturaleza. 

Brown llegará a Barranquilla en los próximos días para afrontar la temporada profesional 2020-2021 con los Caimanes, buscando el onceavo título del equipo y el sexto para el jardinero isleño.